Transformar la producción: Cómo los países en desarrollo pueden digitalizarse
Por qué el fortalecimiento de las capacidades fundacionales debe ser el núcleo de los esfuerzos políticos para beneficiarse de la Cuarta Revolución Industrial.
Por qué el fortalecimiento de las capacidades fundacionales debe ser el núcleo de los esfuerzos políticos para beneficiarse de la Cuarta Revolución Industrial.
La recuperación de China tras la crisis de la COVID-19 puede dar pistas sobre el futuro de las cadenas globales de valor.
La pandemia es un recordatorio de que las inversiones en capacidades científicas, tecnológicas y productivas son necesarias para crear resiliencia en las crisis.
La pandemia está provocando interrupciones masivas en los flujos de inversiones extranjeras directas. Es probable que los países en desarrollo sean los más afectados.
La automatización y relocalización mitigan los riesgos. Las políticas industriales destinadas a reducir la dependencia de las cadenas de suministro mundiales podrían acelerar la tendencia.
La COVID-19 golpeó en el centro de las regiones de las CGV con graves implicaciones para las redes de producción internacionales.
Los Emiratos Árabes Unidos han avanzado en sus esfuerzos por diversificar su economía impulsada por el petróleo y ahora pretenden incursionar en la fabricación de alta tecnología.
El milagro de Asia Oriental ofrece lecciones cruciales para los países en desarrollo sobre el crecimiento de las manufacturas orientadas a la exportación.